¿La ética y la tecnología van de la mano?

“La tecnología no tiene ética, pero la humanidad depende de ella”_

Rebeca Yank

 

 Estando a puertas de la Cuarta Revolución Industrial, es de gran interés analizar la influencia que tiene la inteligencia artificial en los conceptos sociales y morales, pues a medida que hay nuevos conocimientos e invenciones es necesario definir los límites éticos que componen reglas y normas sociales. Por consiguiente, es evidente la necesidad de las sociedades de redefinir ciertos conceptos  y reflexionar acerca de los distintos eventos que van surgiendo, como los son; las decisiones de manera autónoma sobre la vida y la muerte, la modificación genética sobre futuras generaciones, las máquinas que tienen cualidades similares a las de los seres humanos, las nuevas formas de comunicación, los asuntos relacionados con la privacidad y la identidad, ya que, estos eventos cada vez tienen mayor relevancia en el mundo jurídico, político, social y cultural.

Hay que tener en cuenta que, una de las grandes innovaciones que se han desarrollado con la tecnología, son las redes sociales, las cuales han cambiado la forma de interactuar entre las personas  y han aumentado la individualidad, así mismo, han impuesto innovadoras normas de conducta, que están compuestas de nuevos presupuestos éticos, los cuales en algunas ocasiones pueden llegar ser cuestionados por su falta de contenido moral, por tanto, podemos deducir que tecnológicamente estamos avanzando a una velocidad impresionante, pero que la raza humana poco a poco va involucionando en el desarrollo de las actividades de su vida cotidiana.

Lo cual pone grandes desafíos para el derecho puesto que, teniendo en cuenta el factor cultural de cada sociedad, es de gran importancia desarrollar márgenes éticos, es decir, un manual para el manejo de las tecnologías en cada uno de los ámbitos de la vida de un ser humano, como en la niñez, adultez, en la familia, en el trabajo, etc.  Esto con el fin de enseñar a las personas y a las futuras generaciones a utilizar de forma apropiada la tecnología, dado que, en ausencia de estas reglas, existe un gran libertinaje respecto a las formas de emplear los conocimientos e invocaciones, por consiguiente, los individuos y la sociedad no logran identificar los comportamientos malos o buenos en el uso de la tecnología.

Estas reglas, deben ayudarnos a progresar individualmente y en sociedad, para lograr un interés común o general y desarrollar nuevos valores y principios que nos dirijan hacia una sociedad con una sana convivencia, así no se desconocerá la naturaleza humana, dado que si llegamos a despojarnos de ésta y de los derechos inherentes a la existencia humana como los es, el derecho a la vida, al trabajo, a la salud física y emocional, [1]a la privacidad, y de más derechos de las personas que se pueden ver afectados con la ausencia de unas normas éticas respecto al uso de la tecnología y la inteligencia artificial podemos llegar a perjudicarnos de una manera irremediable.

En el campo laboral, es más que evidente que los presupuestos éticos se tienen que ir ejecutando con precisión y eficiencia en vista de que, las empresas obtienen mejores resultados con la IA [2]y por tanto su implementación es común. Por este motivo, el 70% de las grandes empresas en el mundo que actualmente utilizan la inteligencia artificial, forman en ética a sus especialistas en la materia, destacando así la relevancia que tiene la guía ética en las personas que manejan estas innovaciones.

En conclusión, la importancia del desarrollo de un manual ético en la Cuarta Revolución Industrial [3]es crear estándares éticos para el desarrollo íntegro de las personas, resaltando el relevante valor que tenemos como seres humanos, de esta forma podremos utilizar a nuestro favor como una herramienta todos los conocimientos e innovaciones que se crean, y que éstas no desplacen la inteligencia y las funciones del ser humano.

Este código ético puede parecer un aporte básico, pero su complejidad aumenta con el desarrollo de la tecnología, dado que, cada vez nos acercamos más a lo desconocido, el ser humano no tiene claridad sobre la prácticas y consecuencias de la IA[4], es por esto que, surge la necesidad de conceptualizar y regular la producción y el uso de la inteligencia artificial.

Es indispensable un equilibrio entre la ética y los avances tecnológicos, no se puede concebir que los conocimientos e invenciones sigan progresando sin unas bases lógicas y morales para la implementación de la IA, así, de esta forma se garantice la protección y el mayor beneficio de la humanidad.

Lo anterior nos lleva a una importante reflexión y un gran interrogante; ¿los seres humanos estamos listos para asumir como uno de los mayores retos de la humanidad, todos los cambios éticos que traen como consecuencia la implementación de la IA?

 

“Hay que incentivar el crecimiento integral de la humanidad”

 

 

 

 

Bibliografía:

1. http://www.elcolombiano.com/opinion/columnistas/inteligencia-artificial-y-etica-CG8967545 , Columnista: Enrique López Enciso, Publicado el 09 de julio de 2018.

 

2. https://www.thinkingheads.com/tendencia-global/robotica-inteligencia-artificial-etica-debate/, Autores: Thinking Heads

 

3. https://www.elmundo.com/portal/vida/tecnologia/inteligencia_artificial_un_dilema_para_la_humanidad.php

 

4. https://cincodias.elpais.com/cincodias/2018/11/12/fortunas/1542049840_780176.html, PAZ ÁLVAREZ, Sin ética peligra la inteligencia artificial.

 

5. https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-04622010000200002, Biotecnologías y ética: Con especial referencia a la ingeniería genética, Fernando Lolas Stepke
   Profesor Universidad de Chile. Santiago, Chile. Director Programa de Bioética, Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud. 

[1] Cerca de 800.000 personas se suicidan cada año. Esto se debe a diferentes factores, uno de estos es el uso inadecuado de la tecnología, el cual puede causar distintos trastornos mentales que pueden llevar a las personas a quitarse la vida.

[2] Inteligencia artificial

[3] Ejemplo: Código Ético de Conducta Europeo: Marco de conducta ético para el desarrollo, producción y uso de los robots.

[4] Inteligencia artificial.